Lic. Yolanda Figuera
La educación es una función social originada en la comunidad. Cuando ésta adopta la forma de institución nace la escuela. De allí que la escuela es una institución de la comunidad encargada de sistematizar, coordinar y dirigir el proceso educativo. En consecuencia, los intereses y la vida de la comunidad deben constituir los objetivos principales de la escuela.
Desde que la sociedad venezolana evolucionó hasta llegar a la creación de la escuela como agente especializado en la socialización de los jóvenes, se han producido diversas discusiones sobre la relación que debe existir entre la escuela y la comunidad.
Con respecto al proceso evolutivo de la escuela y su labor dentro de la comunidad Harighmat y sus Colaboradores (citado por Escalante y Miñano, 1986) presenta sus teorías o punto de vista generales:
1.- La escuela como una institución.
2.- La escuela como modelo de la comunicación.
3.- La escuela de la comunidad.
La primera teoría, la escuela como institución especializada, prevalece desde que se estableció la escuela, su vigencia en América abarca todo el siglo XIX y aún tiene sus defensores. Considera que la escuela debe realizar una tarea sumamente especializada, cultivando las metas infantiles, enseñándoles las habilidades intelectuales y vocacionales sin interferencia exterior. También plantea que la escuela debe funcionar separada de la comunidad local, su labor ha de desarrollarse silenciosamente, de manera eficiente, sin llamar la atención y limitándose a sus tareas específicas.
En este tipo de escuela tradicional se prefiere el plan por materias y grados, las asignaturas escolares se mantienen separadas las unas de las otras. Se exige que los maestros sean, antes que nada, expertos en el área de sus respectivas asignaturas y en los métodos adecuados para enseñarles. Se insiste en que la habilidad académica es el único camino abierto para obtener el éxito.
La segunda teoría, la escuela como modelo de la comunidad, sostiene que la escuela ha de ser un modelo simplificado en la comunidad. Se basa en que se aprende a vivir como adultos, aprendiendo primero a vivir dentro de la comunidad escolar.
John Dewey (1987) fue uno de los sostenedores de esta teoría y lo ha explicado en los siguientes términos: La escuela de educación desea especialmente, pues, la cooperación de los padres para crear el tono moral sano que haga necesario recurrir a motivaciones inferiores e indignas para regular la conducta. El cultivo de un tono democrático, un sprit de corps, que se haga presente en la vida social de la escuela en conjunto y no solamente en un círculo o grupo dentro de ella. La escuela tiene una vida cooperativa propia que, para bien o para mal, es una institución social genuina, una comunidad (citado por Escalante y Mlñano).
El propósito de una escuela de este tipo es lograr la participación en una serie de actividades relacionadas con la vida misma de la comunidad y, poco a poco, debe asumir la responsabilidad de organizar gran parte de su propio trabajo, formando comités para llevar a cabo los proyectos relacionados con el trabajo escolar, fiestas y clubes, entre otros.
Se aspira que la escuela, organizada como modelo de la comunidad, forme a los mejores ciudadanos de la comunidad por el hecho de haber aprendido las lecciones de la vida en una comunidad democrática reflejada dentro de la escuela.
La tercera teoría, la escuela de la comunidad, es la relación más íntima posible, en donde la escuela debe funcionar directamente como un instrumento para el mejoramiento de la comunidad y en la cual el alumno participa activamente. Esta es la escuela de la comunidad y se ha desarrollado en los Estados Unidos a partir de 1930.
Los planteles y programas de estudio de este tipo de escuela están estructurados sobre la base de temas que permitan dar respuestas eficaces a las necesidades e intereses de la comunidad.
La primera teoría aún tiene sus defensores en América Latina, se considera que la escuela debe limitarse a desarrollar sus funciones específicas de proporcionar educación intelectual, aislada de la comunidad, sin participar en la promoción de su desarrollo.
Por otra parte, cabe destacar que la escuela depende de la comunidad y por lo tanto no debe apartarse de las normas establecidas por ésta. Entre ambas debe existir una interdependencia: la escuela debe promover cambios, dentro de ciertos límites, en el seno de la comunidad.
Por consiguiente, no significa que solamente la acción de la escuela tenga capacidad para emprender cambios que promueva la transformación de los aspectos desfavorables de la sociedad. La escuela tiene una noble función: por una parte, la de contribuir a conservar los valores de la nacionalidad, arraigar los patrones de conducta en las nuevas generaciones, que los distingan como pueblo y exaltar el pasado con ánimo de superarlo y, por otra parte, debe promover los cambios para contribuir al logro de una vida más satisfactoria y digna, tratando que las formas de conducta que se intenten imponer no sean contradictorias con las practicadas con la persona de la comunidad, de lo contrario se correría el riesgo de rechazo absoluto e incluso del repudio de la escuela.
Se considera que la escuela como una de las más importantes instituciones de la comunidad deba coordinar sus acciones con las demás instituciones creadas por la sociedad para satisfacer sus necesidades.
Nunca podría actuar de espalda a otras instituciones. En la práctica esa coordinación es muy difícil de lograr, casi siempre esporádica y depende de las relaciones personales que puedan establecer los docentes.
Generalmente la escuela funciona desvinculada de la comunidad y la mayoría de los docentes no establecen ningún tipo de contacto con ésta, a excepción de las pocas horas dedicadas al trabajo con los alumnos.
Albornoz (1990) define la comunidad como el conjunto donde se desarrolla la vida cotidiana y se establecen relaciones interpersonales o de conocimiento entre personas. La comunidad sería el aula mayor donde se produce cotidianamente el proceso de enseñanza - aprendizaje.
En términos teóricos la vida es la comunidad mundial y concretamente la existencia es la vida cotidiana en las comunidades, utilizando adecuadamente, los instrumentos de cohesión social, como los medios de comunicación de masas. En el área educativa, la escolaridad responde a las necesidades de las comunidades y se promueva una mayor participación de las personasen el manejo de sus asuntos.
Desde que la sociedad venezolana evolucionó hasta llegar a la creación de la escuela como agente especializado en la socialización de los jóvenes, se han producido diversas discusiones sobre la relación que debe existir entre la escuela y la comunidad.
Con respecto al proceso evolutivo de la escuela y su labor dentro de la comunidad Harighmat y sus Colaboradores (citado por Escalante y Miñano, 1986) presenta sus teorías o punto de vista generales:
1.- La escuela como una institución.
2.- La escuela como modelo de la comunicación.
3.- La escuela de la comunidad.
La primera teoría, la escuela como institución especializada, prevalece desde que se estableció la escuela, su vigencia en América abarca todo el siglo XIX y aún tiene sus defensores. Considera que la escuela debe realizar una tarea sumamente especializada, cultivando las metas infantiles, enseñándoles las habilidades intelectuales y vocacionales sin interferencia exterior. También plantea que la escuela debe funcionar separada de la comunidad local, su labor ha de desarrollarse silenciosamente, de manera eficiente, sin llamar la atención y limitándose a sus tareas específicas.
En este tipo de escuela tradicional se prefiere el plan por materias y grados, las asignaturas escolares se mantienen separadas las unas de las otras. Se exige que los maestros sean, antes que nada, expertos en el área de sus respectivas asignaturas y en los métodos adecuados para enseñarles. Se insiste en que la habilidad académica es el único camino abierto para obtener el éxito.
La segunda teoría, la escuela como modelo de la comunidad, sostiene que la escuela ha de ser un modelo simplificado en la comunidad. Se basa en que se aprende a vivir como adultos, aprendiendo primero a vivir dentro de la comunidad escolar.
John Dewey (1987) fue uno de los sostenedores de esta teoría y lo ha explicado en los siguientes términos: La escuela de educación desea especialmente, pues, la cooperación de los padres para crear el tono moral sano que haga necesario recurrir a motivaciones inferiores e indignas para regular la conducta. El cultivo de un tono democrático, un sprit de corps, que se haga presente en la vida social de la escuela en conjunto y no solamente en un círculo o grupo dentro de ella. La escuela tiene una vida cooperativa propia que, para bien o para mal, es una institución social genuina, una comunidad (citado por Escalante y Mlñano).
El propósito de una escuela de este tipo es lograr la participación en una serie de actividades relacionadas con la vida misma de la comunidad y, poco a poco, debe asumir la responsabilidad de organizar gran parte de su propio trabajo, formando comités para llevar a cabo los proyectos relacionados con el trabajo escolar, fiestas y clubes, entre otros.
Se aspira que la escuela, organizada como modelo de la comunidad, forme a los mejores ciudadanos de la comunidad por el hecho de haber aprendido las lecciones de la vida en una comunidad democrática reflejada dentro de la escuela.
La tercera teoría, la escuela de la comunidad, es la relación más íntima posible, en donde la escuela debe funcionar directamente como un instrumento para el mejoramiento de la comunidad y en la cual el alumno participa activamente. Esta es la escuela de la comunidad y se ha desarrollado en los Estados Unidos a partir de 1930.
Los planteles y programas de estudio de este tipo de escuela están estructurados sobre la base de temas que permitan dar respuestas eficaces a las necesidades e intereses de la comunidad.
La primera teoría aún tiene sus defensores en América Latina, se considera que la escuela debe limitarse a desarrollar sus funciones específicas de proporcionar educación intelectual, aislada de la comunidad, sin participar en la promoción de su desarrollo.
Por otra parte, cabe destacar que la escuela depende de la comunidad y por lo tanto no debe apartarse de las normas establecidas por ésta. Entre ambas debe existir una interdependencia: la escuela debe promover cambios, dentro de ciertos límites, en el seno de la comunidad.
Por consiguiente, no significa que solamente la acción de la escuela tenga capacidad para emprender cambios que promueva la transformación de los aspectos desfavorables de la sociedad. La escuela tiene una noble función: por una parte, la de contribuir a conservar los valores de la nacionalidad, arraigar los patrones de conducta en las nuevas generaciones, que los distingan como pueblo y exaltar el pasado con ánimo de superarlo y, por otra parte, debe promover los cambios para contribuir al logro de una vida más satisfactoria y digna, tratando que las formas de conducta que se intenten imponer no sean contradictorias con las practicadas con la persona de la comunidad, de lo contrario se correría el riesgo de rechazo absoluto e incluso del repudio de la escuela.
Se considera que la escuela como una de las más importantes instituciones de la comunidad deba coordinar sus acciones con las demás instituciones creadas por la sociedad para satisfacer sus necesidades.
Nunca podría actuar de espalda a otras instituciones. En la práctica esa coordinación es muy difícil de lograr, casi siempre esporádica y depende de las relaciones personales que puedan establecer los docentes.
Generalmente la escuela funciona desvinculada de la comunidad y la mayoría de los docentes no establecen ningún tipo de contacto con ésta, a excepción de las pocas horas dedicadas al trabajo con los alumnos.
Albornoz (1990) define la comunidad como el conjunto donde se desarrolla la vida cotidiana y se establecen relaciones interpersonales o de conocimiento entre personas. La comunidad sería el aula mayor donde se produce cotidianamente el proceso de enseñanza - aprendizaje.
En términos teóricos la vida es la comunidad mundial y concretamente la existencia es la vida cotidiana en las comunidades, utilizando adecuadamente, los instrumentos de cohesión social, como los medios de comunicación de masas. En el área educativa, la escolaridad responde a las necesidades de las comunidades y se promueva una mayor participación de las personasen el manejo de sus asuntos.
EL ROL DEL DOCENTE COMO PROMOTOR
DE LA PARTICIPACIÓN COMUNITARIA.
Se fundamenta en los principios de la Escuela Nueva sostenido por el pragmatismo, progresivo y el reconstruccionismo social.
Para la corriente de la Escuela Nueva la cual surge como una reacción contra el modelo autoritario de la escuela tradicional, el docente deja de ser instructor para convertirse en "Un facilitador, en un promotor de oportunidades de enseñanza, en un incitador de las necesidades de cognición".
A esta postura se le critica que es "Una pedagogía para la dominación", crece de la neutralidad para evitar la reproducción del orden dominante. Por otra parte, "Sería injusto desconocer su influencia en el entorno pedagógico venezolano, particularmente su contribución en la modernización y expansión del sistema escolar" (Cortazar, 1991).
Para la corriente de la Escuela Nueva la cual surge como una reacción contra el modelo autoritario de la escuela tradicional, el docente deja de ser instructor para convertirse en "Un facilitador, en un promotor de oportunidades de enseñanza, en un incitador de las necesidades de cognición".
A esta postura se le critica que es "Una pedagogía para la dominación", crece de la neutralidad para evitar la reproducción del orden dominante. Por otra parte, "Sería injusto desconocer su influencia en el entorno pedagógico venezolano, particularmente su contribución en la modernización y expansión del sistema escolar" (Cortazar, 1991).
EL DOCENTE COMO LÍDER Y PROMOTOR DE LA COMUNIDAD.
Como promotor social, el educador interviene en la comunidad para promover la participación, organización y coordinador de esfuerzo a fin de lograr objetivos educacionales e integra la comunidad a la escuela y la escuela a la comunidad.
El perfil plantea que el docente debe interpretar la dinámica social como marco de referencia para su acción educativa. Debe conocer la comunidad donde está ubicada la escuela, con el propósito de planificar y centrar su acción en la solución de los problemas de la comunidad, a fin de lograr la integración de ésta y de la escuela.
Tomando en consideración las ideas anteriormente planteadas, el docente tendrá la oportunidad de asumir el rol de líder en la comunidad e inculcar a sus alumnos los valores y tradiciones que contribuyan con la formación de una sólida conciencia nacional, es decir, el desempeño profesional del docente debe ir más allá de las aulas de clases, las actividades realizadas en la escuela deben proyectarse hacia la comunidad fomentando en los educados actitudes positivas hacia la defensa y conservación del ambiente, el buen uso del tiempo libre y de los servicios públicos, el conocimiento y práctica de las leyes de protección ciudadana, la participación en la organización de cooperativas y la integración crítica de los medios de comunicación en el proceso de su formación como ciudadanos.
El diseño prepara el desempeño de un docente como promotor de la participación dentro de su comunidad, aspecto de gran significación relevancia en el momento actual de crisis que vive el país. la escuela no debe aislarse de la comunidad, sino aunar sus esfuerzos para resolver los problemas comunes que son, en definitiva, los mismos de la sociedad.
El perfil plantea que el docente debe interpretar la dinámica social como marco de referencia para su acción educativa. Debe conocer la comunidad donde está ubicada la escuela, con el propósito de planificar y centrar su acción en la solución de los problemas de la comunidad, a fin de lograr la integración de ésta y de la escuela.
Tomando en consideración las ideas anteriormente planteadas, el docente tendrá la oportunidad de asumir el rol de líder en la comunidad e inculcar a sus alumnos los valores y tradiciones que contribuyan con la formación de una sólida conciencia nacional, es decir, el desempeño profesional del docente debe ir más allá de las aulas de clases, las actividades realizadas en la escuela deben proyectarse hacia la comunidad fomentando en los educados actitudes positivas hacia la defensa y conservación del ambiente, el buen uso del tiempo libre y de los servicios públicos, el conocimiento y práctica de las leyes de protección ciudadana, la participación en la organización de cooperativas y la integración crítica de los medios de comunicación en el proceso de su formación como ciudadanos.
El diseño prepara el desempeño de un docente como promotor de la participación dentro de su comunidad, aspecto de gran significación relevancia en el momento actual de crisis que vive el país. la escuela no debe aislarse de la comunidad, sino aunar sus esfuerzos para resolver los problemas comunes que son, en definitiva, los mismos de la sociedad.
PARTICIPACIÓN COMUNITARIA
La participación comunitaria implica la actuación y vinculación de los miembros de una unidad social con sentido de pertenencia a una determinada situación o área geográfica en la solución de sus problemas.
La participación comunitaria dice Silva (1993), procura modificar las actitudes y prácticas que intervienen como freno del desarrollo social, económico y cultural; despierta la capacidad del hombre para resolver sus propios problemas para progresar a través del esfuerzo y el trabajo, tal como lo corroboran Doumet (1987).
La participación de la comunidad en los procesos de transformación y cambio social facilitan la elevación de la calidad de vida de la población de una localidad, contribuyendo con el desarrollo económico, y social de una región, un estado, una nación; de allí que esta deba cumplirse dentro de un plan nacional que abarque a un gran número de comunidades. En el caso venezolano, la participación comunitaria facilita el fortalecimiento de la sociedad civil contribuyendo a acentuar la democracia para hacer del Estado una institución más moderna y eficiente dentro de un proceso de descentralización.
En este sentido, la participación comunitaria sería infructuosa si el Estado y las instituciones gubernamentales no ofrecen políticas destinadas a mejorar las condiciones socioeconómicas de la población, como factor esencial para incentivar el ansiado desarrollo del país; en el caso que aquí ocupa en el ámbito educativo a través de una gerencia descentralizada y autónoma de la escuela.
La participación comunitaria dice Silva (1993), procura modificar las actitudes y prácticas que intervienen como freno del desarrollo social, económico y cultural; despierta la capacidad del hombre para resolver sus propios problemas para progresar a través del esfuerzo y el trabajo, tal como lo corroboran Doumet (1987).
La participación de la comunidad en los procesos de transformación y cambio social facilitan la elevación de la calidad de vida de la población de una localidad, contribuyendo con el desarrollo económico, y social de una región, un estado, una nación; de allí que esta deba cumplirse dentro de un plan nacional que abarque a un gran número de comunidades. En el caso venezolano, la participación comunitaria facilita el fortalecimiento de la sociedad civil contribuyendo a acentuar la democracia para hacer del Estado una institución más moderna y eficiente dentro de un proceso de descentralización.
En este sentido, la participación comunitaria sería infructuosa si el Estado y las instituciones gubernamentales no ofrecen políticas destinadas a mejorar las condiciones socioeconómicas de la población, como factor esencial para incentivar el ansiado desarrollo del país; en el caso que aquí ocupa en el ámbito educativo a través de una gerencia descentralizada y autónoma de la escuela.
LA ESCUELA COMO ORGANIZACÓN.
Salazar y Guzmán (1999), refiere que la escuela pueden considerase una organización por estar constituida por un conjunto de personas cuyos esfuerzos están orientados a la persecución de fines y metas; de allí que directivos y docentes deban actuar como un emporio, planificando el uso adecuado de los recursos de los cuales dispone para lograr los objetivos que se ha trazado.
De esta manera, el personal adscrito a un plantel debe orientar su acción hacia la optimización de la gestión educativa que en ella se lleva a cabo. Son los directivos y maestros quienes tienen la responsabilidad de gerenciar la organización escolar para alcanzar resultados educacionales; es decir, son ellos quienes deben ser capaces de crear condiciones que les permita desarrollar al máximo sus potencialidades.
Como organización, la escuela debe tener una misión en torno a la cual giran los valores y objetivos compartidos para asegurar el logro que ella se ha trazado.
La escuela debe ser escenario de crecimiento para todos aquellos que a ella confluyen, así también debe dar respuesta a las demandas externas de la comunidad y conciliarlos en fundón de las necesidades internas.
Esta idea la compartimos en su totalidad, pues estamos convencidos que los niños aprenden más y mejor cuando los adultos que se encuentran a su alrededor (directivos, docentes y miembros de la comunidad educativa), son capaces de asumir compromisos para favorecerla excelencia de gerencia educativa que se lleva a cabo en la institución escolar.
De esta manera, el personal adscrito a un plantel debe orientar su acción hacia la optimización de la gestión educativa que en ella se lleva a cabo. Son los directivos y maestros quienes tienen la responsabilidad de gerenciar la organización escolar para alcanzar resultados educacionales; es decir, son ellos quienes deben ser capaces de crear condiciones que les permita desarrollar al máximo sus potencialidades.
Como organización, la escuela debe tener una misión en torno a la cual giran los valores y objetivos compartidos para asegurar el logro que ella se ha trazado.
La escuela debe ser escenario de crecimiento para todos aquellos que a ella confluyen, así también debe dar respuesta a las demandas externas de la comunidad y conciliarlos en fundón de las necesidades internas.
Esta idea la compartimos en su totalidad, pues estamos convencidos que los niños aprenden más y mejor cuando los adultos que se encuentran a su alrededor (directivos, docentes y miembros de la comunidad educativa), son capaces de asumir compromisos para favorecerla excelencia de gerencia educativa que se lleva a cabo en la institución escolar.
8 comentarios:
Buenas tardes profesora Yolanda estoy de acuerdo con su publicaciòn ya que hoy en dia la tecnologìa educativa esta presente en nuestras vidas. La tecnologìa està muy avanzada tiene una capacidad de tratamiento de informaciòn. La educaciòn y las nuevas tecnologìas aportan importantes herramientas para solucionar nuestros problemas de aprendizaje y de alguna manera se presentan a formar valores y actitudes significativas.
Hola profe, soy Yesenia Garcia estudiante del V Semestre de Educacion Integral. En cuanto al material de la actitud del docente ante las nuevas tecnologias, me parece que es un tema bastante interesante y a la vez evadido por los docentes en el area pedagogica, ya que con los ultimos cambios que la sociedad ha venido afrontando las nuevas tecnologias han surgido para dar respuesta a muchas de las necesidades presentadas por los dicentes en proceso de enseñanza aprendizaje, pero sin embargo tenemos que asumir que se ha convertido en un reto para la escuela y los maestros integrarse a esta nueva modalidad, inclusive aun habemos personas en general que desconocemos del uso de estas herramientas. excelente si blog y sus aportes.
KRISMEL GUERRA
Esta muy interesante este blog porque las nuevas tecnologias nos brindan la facilidad de estar conectados con el mundo. Aunque algunos docentes se niegan a incluirlas en sus clases son muy importantes porque nos permite brindar a las niñas y niños un conocimiento integral sin dejar a un lado las herramientas tecnologicas.
Buenos días profesora soy Mariela Campos, respecto a la actitud del docente frente a las nuevas tecnologías pienso que deben incluirlas a diario y sin temor de llegar a ser sustituidos por computadoras ya que a la mayoría de los estudiantes se les han dado las canaimas y es lamentable que un dicente le pregunte a su profesor como realizar una actividad en esta herramienta tan valiosa y esté no sepa ni como encenderla. Parece increíble pero es cierto, muchas personas piensan que la tecnología es una herramienta y ya, pero no es así porque a medida que pasa el tiempo la tecnología avance y nosotros debemos avanzar junto a ella conociendo cada día como emplearla en nuestra vida diaria. Para el docente sera más sencillo enseñar a las niñas y niños con las herramientas tecnológicas.
Buenas tardes profesora es Dayana Arreaza, respecto a la lectura pienso que la tecnología es importante para la vida del ser humano, es por eso que tanto el docente y las instituciones deben orientar al discente lo importante de estar conectado con el mundo tecnologico y hacerle llegar la información a través de la práctica.
Es Marynes Canario mi comentario es que la tecnología es importante y el docente debe evolucionar con la misma para así involucrar a los estudiantes y ellos se vallan adaptando a las nuevas herramientas tecnologicas que hoy en día nos ofrece el mundo.
Buenas tardes profesora, es Fanni Montaño, hoy día estamos en un mundo muy avanzado y pienso que todos debemos evolucionar junto a la tecnología porque está nos brinda muchos beneficios y como futuros educadores debemos comprender que estar informado y actualizado es vital para nuestra profesión y nuestro día a día.
La Tecnología es una herramienta básica para el ser humano. Algunos docentes se niegan a utilizar la tecnología por miedo a quedar mal con el disdcente, es por eso, que todo profesor debe saber todo lo referente a las nuevas tecnologías para así darle la enseñanza o práctica adecuada a los estudiantes.
Yrma Salazar.
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